martes, 25 de marzo de 2014

De juegos de mesa


Ilustración: Paul Kidby

Al Club Escudería Alba se le ocurrió contar con nosotros para montar una jornadilla de juegos de mesa para los socios. Así que el sábado pasamos la tarde en el Brillante, entre dados y tableros. En realidad, estuvimos muy tranquilos, de modo que aprovechamos para aprender a jugar al único juego de la asociación que no habíamos estrenado todavía: el Mamma mía (nada que ver con Abba), un jueguecillo de cartas fácil y rápido, pero muy divertido, que consiste en reunir ingredientes para hacer las pizzas menos apetitosas del mundo (salami, piña, pimientos, aceitunas y champiñón, tú me dirás). Y entre eso, un Dados Zombie, un Samurai Sword, repartir juegos y enseñar las reglas a los que querían probar, pasamos un rato de lo más entretenido.

Como recompensa  a una tarde de duro trabajo, después organizamos una cena en el local y echamos una intensa sesión de las Máscaras de Nyarlathotep.

domingo, 23 de marzo de 2014

El Ent-cuentro



Aunque decidimos que este año no hubiese jornadas de La Última Posada, la verdad es que echábamos de menos jugar tirados al sol con los amigos, así que se nos ocurrió quedar a un grupillo, el fin de semana pasado, en Cerro Muriano, que encima se nos va Miguel a Polonia en unos días y había que despedirlo en condiciones (no sea que se arrepintiese y le diera por quedarse :-P).




Y lo pasamos genial (ojo que no es por dar envidia, es para agradecéroslo a todos). Andábamos bastante relajados, con eso de que el buen tiempo ha llegado de golpe y que, por casualidad, tuvimos el centro para nosotros solos la mayor parte del finde. La primera noche coincidimos con unos niños bastante prometedores que, en vez de desfilar, organizaron un rol en vivo con mosqueteros, una loca y un jardinero con sombrero, pero se marcharon al día siguiente. Se organizaron algunas partidas de rol (Los vengadores, Conan D100, Cyberpunk y algunas más), otros trajeron juegos de mesa (a montones, gracias), Magic y Heroclix, algunos hacían malabares, montamos una barbacoa al aire libre e incluso preparamos un par de talleres (uno de marionetas, con un fraguel como invitado de honor y otro de amigurumi), pero, sobre todo, nos pusimos al día, reencontramos amigos, conocimos gente estupenda y descansamos.

Así que, aunque sea con una semana de retraso, gracias a todos. Esperamos que pronto, más.